Recientemente he podido asistir a algunas de las clases magistrales del Master en Derecho de la Contratación Pública y Compliance en el sector sanitario que ha promovido y organizado Tesera de Hospitalidad. Además, he podido intervenir en este master con el tema de la transición a la contratación pública electrónica.
A raíz de este Master el Colegio Oficial de ingenieros Industriales de Madrid me ha invitado a la Jornada de DIGITALIZACIÓN EN SANIDAD, para charlar sobre la contratación pública electrónica en el sector público sanitario.
Lo que me han trasmitido en el Master los responsables de contratación en el sector público sanitario, ha sido que tienen una situación de permanente tensión entre la necesidad de un aprovisionamiento ágil y rápido y unas leyes que no tienen precisamente esos propósitos en su concepción. Es un problema complejo.
Ya sabéis que todo problema complejo, siempre tiene una solución simple … y equivocada. Y por tanto no creo que el formato electrónico sea la solución a todos los problemas de la contratación en el sector público sanitario. Pero, si creo que este formato es el ingrediente esencial que tiene que utilizar cualquier solución viable que se implemente.
Como casi siempre, la clave y la llave están en las personas. El formato electrónico bien manejado por las personas adecuadas se convierte en la herramientas que puede ayudar al propósito de una contratación pública eficiente, ágil y rápida en el sector salud.
En mi opinión este problema complejo radica en que estamos ante un proyecto de innovación. Mejor dicho dos proyectos de innovación.
Me explico. Los propios agentes que intervienen en la contratación pública suelen confundir en un primer momento la compra pública de innovación y la innovación en la contratación pública. Y en el sector salud, confluyen estos dos tipos de proyectos.
Desde mi punto de vista la transición a la contratación pública electrónica es un proyecto de innovación. Aunque se esté llevando a cabo como un servicio y un suministro habitual, no lo es. Además en el sector sanitario, requiere de mucha innovación que podría ser canalizada con los nuevos procedimientos que introduce la Directiva de contratación: “La asociación para la innovación”. No estamos inventado la rueda, ya hay muchas experiencias que lo avalan. Pero la rueda, ya sabéis, hay que echarla a rodar para que pueda demostrar su utilidad.
En fin. Trataremos de explicar este punto de vista, convenientemente en la Jornada El jueves 12 de mayo a las 17h30, en el salón de actos del COIIM, C/ Hernán Cortés, 13 28004 de Madrid Nos vemos allí.